Querer y no poder

Hace días que no me siento bien. Es como una mezcla de bajón, cansancio, desmotivación, morriña... Empecé a correr sin ningún objetivo y sin ninguna meta. Consciente de mis problemas crónicos de rodilla... No me marqué ninguna meta para no caer en la fustración. Pero es inevitable. No puedo. Mi mente va más allá y aunque no lo haga público, en lo más profundo de mi resuenan objetivos, metas, carreras, marcas... Y mucho más cuando Juanmi , Isma u otros amigos deportitas me hablan de sus entrenos, de sus carreras, de sus ilusiones... Llevo casi una semana sin hacer nada. Muchos factores se han juntando a mi alrededor que han influido negativamente en mi estado de ánimo: dolor en la rodilla, final de trimestre, notas, sesiones de evalución, noches sin dormir bien por los "peques" y ahora un leve resfriado... Es un querer y no poder. Aún así tengo que seguir hacia delante. Así que mañana al mediodía, si el resfriado no va a más, saldré de nuevo a correr. La ruta del senglar y mi flamante Forerunner 305 me esperan.

Y para levantar esos ánimos cuelgo una de las miles de fotos que hice en el verano de 2007 cuando realicé la travesia de Carros de Foc. ¡Qué buenos recuerdos!